Guía de estudio

¿Por qué apologética? (Judas 22-23) – Estamos llamados a mostrar misericordia a los que dudan, ofreciendo respuestas que traigan esperanza y verdad.
Algo en lo que pensar: ¿Cómo respondes cuando alguien cercano a ti lucha con la duda?

Obediencia doctrinal (1 Pedro 3:15) – La Biblia nos ordena estar listos con una defensa razonada de nuestra fe, hecha con mansedumbre y respeto.
Algo para pensar: ¿Qué pasos prácticos puedes tomar para prepararte para responder preguntas sobre tu fe?

Apologética positiva y negativa (2 Corintios 10:3-5) – Presentamos evidencia de Cristo y desmantelamos los argumentos en su contra.
Algo en lo que pensar: ¿Qué enfoque se siente más natural para usted: presentar evidencia o responder objeciones? ¿Por qué?

Jesús practicó la apologética (Mateo 11:2–5; Juan 10:37-38) – Jesús señaló Sus obras como evidencia de Su identidad.
Algo en lo que pensar: ¿Cómo podemos seguir el ejemplo de Jesús señalando la evidencia de la obra de Dios en nuestras vidas?

Desafío cultural (Hechos 17:22-23) – Pablo razonó con la cultura al encontrar un terreno común y señalar a Cristo como la verdad última.
Algo para pensar: ¿Qué "altares culturales al dios desconocido" ves hoy en día donde podrías comenzar una conversación sobre el evangelio?

Certeza personal (Colosenses 2:8) – La apologética no solo ayuda a los demás, sino que fortalece nuestro propio fundamento contra el engaño.
Algo para pensar: ¿De qué manera el estudio de las razones para la fe ha fortalecido tu caminar personal con Cristo?

Puntos de oración

Construye compasión por los perdidos: pídele a Dios que mueva tu corazón con compasión por aquellos que dudan o vagan sin la verdad.
Sea un defensor preparado: ore por diligencia en el estudio de las Escrituras y la apologética para que pueda compartir su fe con confianza.
Derribar fortalezas – Pídele a Dios sabiduría para desmantelar las falsas creencias y las mentiras culturales con gentileza y respeto.
Fortalece la fe personal – Ora para que tus propias dudas se encuentren con la verdad de Dios, lo que te llevará a una fe más profunda e inquebrantable.
Equipe a la próxima generación: pídale a Dios que lo use para capacitar a sus hijos, jóvenes y otras personas para defender y compartir el evangelio con valentía.